Según la OMS, la obesidad ha alcanzado proporciones epidémicas a nivel mundial. Cada año mueren, como mínimo, 2. 8 millones de personas debido a la obesidad y al sobrepeso.
La obesidad se define como una acumulación excesiva de grasa y constituye un factor de riesgo para numerosas enfermedades crónicas. Si nos referimos a la obesidad infantil, éste sería uno de los principales problemas de salud del siglo XXI.
Un estilo de vida saludable y el ejercicio físico son dos buenos factores que nos ayudarán a prevenir el sobrepeso y conviene empezar a aplicarlos desde la niñez.
En muchas ocasiones, hay un claro desequilibrio entre las calorías que consumimos y las que gastamos. No consumimos las cinco raciones recomendadas de fruta y verdura y, sin embargo, los refrescos, bollería industrial, dulces se toman en muchos hogares casi a diario. Si a esto le unimos el aumento del sedentarismo, resulta lógico que se incrementen el ratio de la obesidad.
Desde Youfarma, queremos proponeros unos sencillos hábitos saludables para que los incorporéis a vuestra actividad diaria.
– Haz cinco comidas diarias. No te saltes el desayuno, ya que en las primeras horas los niveles de energía son más bajos y hay que reponerlos. Para una alimentación sana hay que incluir: frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos. Acostúmbrate a tomar al menos cinco porciones de fruta y verdura al día, ya que además de ser una importante fuente de vitaminas y minerales, contienen antioxidantes naturales y resultan ricas en fibra.
– Limita el consumo de azúcares y de sal, así como de grasa teniendo en cuenta que las grasas trans (que encontramos en los alimentos procesados, pastelería, bollería, comida rápida..) deben ser evitados. La manera en que cocinamos también es importante. Sustituye las frituras por cocciones al vapor, al horno o a la plancha
– Come despacio. Bocados pequeños que faciliten la digestión y que ayuden a saborear los alimentos. Controlarás mejor lo que comes y la sensación de saciedad se producirá antes.
– Bebe agua: Te ayudará a mantenerte hidratado y es primordial para el mantenimiento y desarrollo de nuestro organismo. Se aconseja beber de 6 a 8 vasos diarios.
– Educa en los buenos hábitos desde la infancia. Acostumbra a los niños desde pequeños a comer menús variados y a experimentar con las distintas texturas y sabores de los alimentos.
– Muévete, haz ejercicio. La vida sedentaria lleva a que muchas personas acumulen kilos y constituye un importante factor de riesgo de la mortalidad mundial. La OMS recomienda: 60 minutos diarios de actividad moderada o intensa para niños y adolescentes y 150 minutos semanales de actividad moderada para adultos.
– Por último, no le robes horas al sueño. Dormir ayuda a proteger la salud física y mental.
Como verás se trata de pequeños hábitos fáciles de llevar a la práctica, ¿te apuntas?